El baño es un clásico espacio de caos que se nos demanda sin darnos cuenta. Tendemos a acumular muchas cosas que luego nunca encontramos, la mayoría de las veces porque incluso se nos ha olvidado que las teníamos.
En nuestro quinto día del reto 21 días para tener tu casa en orden, vamos a empezar a controlar el baño.
Hoy se acaban oficialmente mis vacaciones y toca volver al ruedo como todo hijo de vecino. La depresión post vacacional es típica de estas fechas y yo no soy distinta por mucho que me guste lo que hago. Pero tengo mis trucos, y hoy los quiero compartir contigo.
El mundillo de la organización, como ya te conté en La Organización y el Orden como terapia para la ansiedad, ofrece muchas soluciones a la hora de lidiar con problemas anímicos.
Reorganizar una estancia, cambiar la decoración o hacer limpieza de armarios son cosas que nos hacen sentirnos mejor y que nos ayudan a cobrar fuerzas de cara a una nueva etapa.
¿Te acuerdas de cuando empezabas el cole y te proponías todas esas cosas para llevar bien el curso? Evitar los tachones en las libretas, llevar los deberes al día… pues esto es muy parecido.
Hace unas semanas, Rocío, del blog Corriendo sin zapatillas, me preguntaba si yo tenía un Cajon de la cosas importantes. Y lo cierto es que sí, que lo tengo, aunque no es un cajón exactamente, es una caja.
Ahora mismo, la caja está un poco más vacía, porque todos los documentos importantes y las fotos, como te contaba en #quieromicasaenorden: un escritorio de ordenador caótico, las tenemos en la Nube.
Hoy es viernes y, como siempre, toca un nuevo capítulo de #quieromicasaenorden. En esta ocasión trataré de ayudar a E a que ponga un poco de orden en una mesa infantil.
Nuestros pequeños artistas, son tremendos y, en cuanto nos despistamos, nos generan un caos que ríete tú de las correrías de Attila. Yo tengo una artista de ese tipo en casa y, cuando el arte la invade, pocos ojos son suficientes para que no despliegue todo su potencial por muebles, suelos y muñecos por igual.
Una buena organización ayuda a que controlar su creatividad sea mucho más sencillo y, además, también les ayuda a que aprendan dónde pueden pintar y con qué y dónde no.
Cuántas veces escuchas eso de «a mí las plantas se me mueren», «yo con las plantas soy un desastre» y similares. Puede que alguna vez hayas comprado una planta que no va bien para tu casa por sus condiciones de luz o humedad pero eso no es lo normal.
Estoy segura de que siempre que compras una planta le preguntas al vendedor si es de interior o exterior y cuanta luz o humedad necesita.
Entonces, ¿cuál es el problema?
