Organizar una casa, como sabes, es solo un medio para alcanzar un fin mucho más importante. Esto ya lo vimos hace un par de años cuando te hablé de Los olores y el hogar. Si no lo has leído todavía, hazlo antes de seguir.
El objetivo final a la hora de organizar nuestra casa es alcanzar una serie de sensaciones que nos hagan sentir mejor en el día a día. Algunas de estas sensaciones son el control, la paz, el relax, la armonía, la sencillez o el optimismo. Evidentemente, puede haber muchas otras.
El caso es que organizando nuestro hogar, alcanzamos un primer nivel, algo así como la base. No obstante, es posible ir un paso más allá y potenciar todavía más estas sensaciones si jugamos con cosas como la iluminación o los olores.
Hoy me gustaría hablarte de eso, de jugar con los aromas para alcanzar determinadas sensaciones.