La teoría de las ventanas rotas es una teoría de criminología que, aunque no lo parezca, tiene mucho que ver con lo que sucede cada día en nuestras casas. Y no es porque la desorganización sea un crimen.
Seguramente habrás oído hablar de ella ya que se usa mucho para tratar de temas de urbanismo y sociología urbana. Vamos, que los políticos la usan para hablar de cosas que pasan en la ciudad.
Pero no me enrollo más y vamos al grano.
Qué es la teoría de las ventanas rotas
Mejor te lo explico con un ejemplo, que lo vas a entender mucho mejor.
Imagina que vives en un barrio normal y corriente, en el que hay un almacén o un supermercado. El caso es que, por la razón que sea, el super cierra.
Pasan las semanas y empezarás a ver como las ventanas se van opacando y llenando de polvo. Un día, aparecerá una ventana rota. Si no se arregla (que es lo normal), muy poco después aparecerá otra, luego otra, un día se colarán en el interior, habrá pintadas.
Tiempo después ese tipo de vandalismo se irá contagiando a los elementos de alrededor (bancos públicos, papeleras, otros locales…).
Esto no es sólo una teoría sino que ha sido comprobada desde los años 80 con varios estudios y experimentos.
Qué tiene esto que ver con mi casa
Es posible que ya te hayas dado cuenta de los paralelismo que esta teoría tiene con la organización del hogar.
Un fin de semana te pegas un palizón para dejar la casa perfecta y durante una o dos semanas la mantienes. Un día, porque estás cansado o vas a toda prisa, dejas unos papeles de cualquier manera encima de la mesa del salón. Al día siguiente dejas allí la caja de costura y un boli.
Llega el momento de usar la mesa ocupada y, por no ponerte a ordenar en ese momento, coges las cosas y las dejas encima de unos libros en la estantería. ¿Reconoces el patrón?
Cuando te des cuenta, todo tu salón volverá a estar hecho un desastre.
Cuál es la solución
Al igual que en los casos de criminología y sociología, la solución es arreglar los problemas cuando sean pequeños. Eso evitará que sigan creciendo hasta que sean incontrolables.
Si se rompe una ventana, arréglala. Cuando tengas que guardar unos papeles, oblígate a hacerlo en el sitio correcto en el momento.
Si, por alguna razón, no pudieras hacerlo, oblígate a hacerlo antes de irte a la cama.
Esa es la clave. Esa es la rutina que tienes que implementar. La casa siempre debe estar bien antes de irte a la cama.
Si consigues hacer esto, te garantizo que tu casa se mantendrá en orden sin mucho esfuerzo.
15 thoughts on “La teoría de las ventanas rotas”