Esta semana es San Valentín y Handy Bag, con quien colaboro en este post, me lanzó un reto para transmitirte el enamoramiento que tengo yo con sus bolsas desde el día que los conocí.
Si me sigues desde hace tiempo, sabes que ya colaboré con ellos. Debo reconocer que hasta entonces no había prestado demasiada atención a los diferentes tipos de bolsas o a sus materiales de fabricación pero me sorprendieron tanto que no he dejado de utilizarlas desde entonces. Y no solo para trabajar, ojo, también en mi día a día en casa.
Si, como yo, eres un enamorado del orden o la limpieza, seguro que notarás la diferencia. Y es que hay un tipo de bolsa diferente en función de tus necesidades.