Rutina diaria para el orden en el baño

Hace una semana, te contaba cómo ordenar el baño pero, una vez que lo tienes organizado, qué pasa, cómo lo mantienes.

Pues vamos a ello. Hoy te voy a dar una serie de pautas para que, con muy poco esfuerzo, el baño esté perfecto cada día.

Limpiar el baño en cinco minutos

La rutina diaria de limpieza del baño no es otra que la escribí en limpiar el baño en 5 minutos. Muchos ya lo habéis comprobado y lo compartís en redes sociales, de verdad son cinco minutos. No voy a repetirme. Si no lo has leído aún, échale un vistazo al post antes de continuar.

Aún así, siempre se puede mejorar. Hoy quiero complementar ese post con una serie de pequeños trucos y micro rutinas que van a hacer todavía más ágil la limpieza.

Rutina para mantener las encimeras despejadas

Para que funcione y sea rápida de verdad, lo primero que tienes que conseguir es que todas las encimeras estén despejadas.

Algunas de las cosas que debes conseguir para esto es dejar siempre las toallas en su sitio cuando las uses y recoger los botes una vez los uses.

Si esto no suele ocurrir en tu casa párate a pensar si es cómoda la forma en que está todo colocado. ¿Está el toallero demasiado lejos del lavamanos? ¿Hay que moverse mucho para colocar un bote en su sitio? La comodidad es clave para que algo se haga o no.

Rutina para la ropa sucia

La ropa sucia debe ir siempre dentro del cubo. Si es habitual que se quede en el bidet o encima del propio cubo igual hay que darle una vuelta. Mira a ver si el cubo está en un sitio cómodo y, en caso desesperado, quítale la tapa. Sé que no es estético pero funciona. Si todo el mundo está acostumbrado a dejar las cosas encima del cubo ahora, por narices, las dejará dentro.

Cerrar siempre los botes

No sé por qué es tan habitual encontrarte con los botes de rosca medio abiertos pero ocurre. El problema de esto es que son habituales los derrames y pérdidas. Así es como aparecen las manchas pegajosas y las malas sensaciones.

Si es tu caso, intenta pasarte a los tapones de click a ver si hay suerte.

Truco extra: Si al limpiar te encuentras con un bote con demasiado polvo, es posible que apenas se use. ¿Merece la pena seguir teniéndolo? Ahí lo dejo.

Limpieza rápida sobre la marcha

No hay nada que dé peor sensación que una pila con chorretones de pasta de dientes o con pelillos del afeitado. Acostúmbrate a pasar un agua rápida cada vez que utilices el lavamanos. Te darás cuenta de que se mantiene perfecto durante más tiempo.

Lo mejor de este truco es que apenas lleva tiempo, es solo una cuestión de crear un hábito para que salga solo, sin pensar.

Ojo con las alfombrillas

Vamos con la alfombrilla de la ducha o la bañera. Ponerla, la pone todo el mundo, pero quitarla, no la quita nadie.

Si no has implantado en casa la costumbre de dejar los zapato en la entrada, te encontrarás pisando con los zapatos la alfombra que luego pisas descalzo. No parece muy higiénico, ¿verdad?

Y ya no hablemos de la alfombrilla antideslizante. Cuando no se quita al terminar, se convierte en un criadero de hongos por la falta de secado.

Conclusión

Ya ves que la mayoría de estos trucos son micro rutinas. Estas pequeñas costumbres que parece que cuestan mucho hacen que, una vez implantadas, casi ni te enteres de que las haces. Y ahí está la magia de las casas que se mantienen solas.

Primero desarrollas pequeñas micro rutinas que reducen enormemente las limpiezas más profundas. Gracias a esas micro rutinas, cuando llega la hora de la limpieza profunda, tienes mucho menos que limpiar así que es mucho más rápido.

Al principio, si te cuesta, te recomiendo que hagas un pequeño listado de estas rutinas diarias de baño y la pongas en el espejo. De recoger la toalla nadie se acuerda, pero para mirarse al espejo todos tenemos un ratito.

Si os apetece profundizar más en el tema de rutinas, el próximo viernes dia 2 de marzo vuelve a Madrid el taller de rutinas que ya podéis comprar en la tienda online.